Si eres mexicano de corazón, seguramente no te será nada raro comerte un dulce de chilito. Pero, a lo mejor, tienes amigos que vienen de otros países o habrás escuchado alguna vez a un extranjero enloquecer por los dulces mexicanos, ¿por qué será?
En otros países, cuando alguien escucha la palabra dulces, generalmente lo que come es algo con sabor a frutas, a azúcar, almíbar y más. Pero los mexicanos tenemos una idea un poquito diferente de los dulces.
Los mexicanos le ponemos chile hasta a los Dulces
A lo largo de generaciones, los mexicanos hemos adquirido un gusto muy especial por lo picoso, ¿o apoco no le pones salsa o chile a todo? Y cuando llega un extranjero a probar un dulce enchilado, sólo hay dos maneras en que esto termine: o los termina odiando o los ama.
En México, hay dulces de tamarindo, guayaba y manzana con picante y a veces, ¡hasta le ponemos más salsa!
Los hay en paleta, caramelos, chicles, gomitas o como acompañante. Vienen en salsas para poner a las papas, cacahuates, jicaletas o en polvo para echarlo a distintas botanas o, mejor aún, para combinarlos y hacer que piquen más.
A los mexicanos nos gusta tanto el picante que hasta hay paletas heladas con chile y, en algunas partes, hasta el chocolate se prepara con chile.
Amamos tanto enchilarnos que algunas de estas golosinas no son más que polvo de chile con azúcar. ¡Nos encanta el sabor del picante!
Si tienes un amigo que viene de visita desde otro país, no dudes en llevarlo a Morrikos para probar los deliciosos dulces picosos y aciditos que tenemos para ellos. Desde gomitas enchiladas hasta salsas preparadas para nuestras papas, cacahuates y dorilokos. Estamos seguros de que le van a encantar, pero eso sí, cómprale una botella de agua Ciel, por eso de la enchilada.
